Nuestra sociedad está en constante cambio y por lo tanto nos hemos de ir adaptando a ello. Si echamos la vista atrás (y no hace tanto tiempo) nos damos cuenta de la gran evolución de las TIC en el siglo XXI. Por ejemplo, en las casas de antes no podían faltar los 20 tomos de enciclopedias; toda la información siempre nos llegaba en formato papel. El teléfono era fijo, había 5 o 6 canales de televisión, la música se escuchaba en un casette…
Queda evidenciado por tanto que las NNTT están cada vez más presentes en nuestras vidas, y por tanto es necesario hacer una redefinición de contextos, así pues, el educativo ha de cambiar.
A los alumnos de hace diez años, no se les pedía lo mismo que a los alumnos de hace cincuenta años, y tampoco lo que se les pide a los alumnos de hoy en día.
Uno de los principales objetivos del currículo para la escuela del siglo XXI es utilizar las tecnologías de la información así como los medios de comunicación, en el proceso de aprendizaje y adquisición de nuevos conocimientos, con sentido crítico respecto a los mensajes recibidos y elaborados.
Por lo tanto los alumnos de este preciso momento, han de tener:
· Comunicación y colaboración
· Investigación y manejo de la información.
· Pensamiento crítico, solución de problemas y toma de decisiones.
· Ciudadanía digital.
· Operaciones y conceptos de las TIC.
En definitiva, lo básico sería que hoy en día el alumnado de primaria debe ser competente para buscar, localizar, organizar y comunicar la información utilizando las tecnologías de la información y la comunicación como soporte.
La emisión de todo juicio bien sea valorativo o crítico está directamente relacionada con la madurez personal y moral de cada individuo, que, por supuesto, guarda relación con la edad pero no está vinculada a ella en relación de proporcionalidad directa.
Así pues, y máxime en el caso del niño, se hace preciso que el contacto que puede mantener con las Tic sea regulado. Esto es, por ejemplo, el trabajo o búsqueda de información en Internet para un niño de una determinada edad ha de estar pautado y seguir las normas de un adulto. No se trata únicamente de que en los ordenadores de las aulas de un colegio de primaria o secundaria existan filtros de contenidos, el niño o adolescente debe ser capaza de realizar ese “filtrado de la información” por sí mismo.
Así pues, y máxime en el caso del niño, se hace preciso que el contacto que puede mantener con las Tic sea regulado. Esto es, por ejemplo, el trabajo o búsqueda de información en Internet para un niño de una determinada edad ha de estar pautado y seguir las normas de un adulto. No se trata únicamente de que en los ordenadores de las aulas de un colegio de primaria o secundaria existan filtros de contenidos, el niño o adolescente debe ser capaza de realizar ese “filtrado de la información” por sí mismo.
TERESA DE LA GUÍA ANGULO
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